La menopausia es la época de la vida en la mujer en la cual deja de tener menstruaciones, normalmente a partir de los 45, ya que sus ovarios dejan de producir las hormonas estrógenos y progesterona, dando paso a la finalización de su etapa fértil. A modo general, se determina que una mujer adulta entra en la menopausia cuando está durante un año seguido sin período menstrual.
Los síntomas de la menopausia son muy variados y no tienen porqué aparecer siempre o todos en la mujer ni al mismo tiempo. Los sofocos y sudoraciones nocturnas, acompañadas de dificultad para dormir profundamente o conciliar el sueño, los cambios de humor repentinos (ira, depresión, fatiga mental, inseguridades,...) y dificultad de foco, la sequedad vaginal, y alteraciones en el cabello (caída) y vello facial (incremento), pérdida de masa muscular y de densidad ósea, alteraciones metabólicas y variaciones en el % de grasa, son los más comunes.
La menopausia precoz se diagnostica en mujeres que la alcanzan por debajo de los 40 años, debido a una disminución de los estrógenos y cese de la ovulación, predisponiendo a la mujer a sufrir enfermedades como la osteoporosis y alteraciones cardiovasculares. Normalmente, esta causada por fallos prematuros en la funcionalidad del ovario, cirujías del aparato reproductor, fármacos con hormonas, factores genéticos, enfermedades autoinmunes, infecciones y, por último y no menos importante, un mal estilo de vida: sedentarismo, nutrición poco saludable e inadecuada, baja actividad deportiva, rotura de biorritmos....
Mujeres menores de 40-45 años a las cuales les ha cesado la menstruación se les debe hacer un abordaje integral que incluya: analítica para medir su estado hormonal y metabólico, estado fisiológico de la persona (composición corporal, sobrepeso/pérdida extrema de peso, posible amenorrea por estrés físico/mental...), exploración física y orgánica (alteraciones en los órganos reproductores o enfermedades del sistema reproductivo), enfermedades y antecedentes familiares, estilo de vida,...
El tratamiento para la menopausia dependerá mucho de la mujer y de los síntomas (número e intensidad) que presente. Sin lugar a duda, una correcta alimentación, actividad y descanso serán las bases, para así poder mantener la condición física y correcta composición corporal (en la menopausia se suele perder masa muscular y debilitarse los huesos sino se presta atención al estilo de vida, así como enfermedades cardiovasculares debido a la pérdida de colágeno y la consecuente rigidez de los vasos). Además, se podrá realizar una terapia hormonal para aliviar los síntomas causados por la bajada de estrógenos (sofocos, pérdida de densidad ósea, sequedad vaginal, incontinencia urinaria, etc.), uso de suplementos como la vitamina D para fortalecer los huesos, etc.